viernes, 25 de noviembre de 2011

Bajo la pálida sombra de Mozart

Por: Ignacio Trejo Fuentes


Este texto se publicó originalmente en la revista Siempre!


Hacia 1790, Wolfgang Amadeus Mozart está muy enfermo y padece severos problemas económicos, y gran parte de los mecenas se niegan a reconocer su talento; tiene líos con una Sociedad masónica que le recrimina no ser fiel a los preceptos de ésta y en consecuencia se determina matarlo. Por otra parte, el acaudalado Alexander se propone conocer y hablar con Amadeus, en el plano personal y no en el artístico, porque conoce al dedillo su obra, detalles de su vida y aun conserva partituras y todo cuanto se refiera al músico.

Luego de vivir en el extranjero, Alexander vuelve a su ciudad y se casa con Brigitte, hija de un poderoso terrateniente; los desposados se encargan de administrar la fortuna de ambas familias, y son esos los días en que el hombre se obsesiona por conocer al artista, y para eso se vale de sus relaciones, que tejen una red para lograr el propósito (incluso tiene relaciones con una prostituta que había sido frecuentada por Mozart.)

Alejandro Aldana dispone su rico material en varios planos: va de la tercera persona narrativa a la epístola, y agrega cartas escritas por Mozart y líneas de algunas de sus óperas. El tenor de la prosa es elegante, preciso; y sobresale la descripción de los paisajes y escenarios donde se mueven los personajes. Y qué bien maneja, por un lado, la historia amorosa de Alexander y Brigitte, y por otro la conspiración urdida para acabar con Amadeus (de ahí el título del libro).

Como resultado de sus pesquisas, el devoto de Mozart conoce a miembros distinguidos de la Sociedad masónica, y como condición para ingresar a ella y entregarle documentos pertenecientes al artista, le encomiendan matarlo. ¿Qué hacer? ¿Asesinar al genio con tal de conocerlo muy de cerca? Eso sería traición, de modo que escapa a otra ciudad mientras calibra el asunto. De regreso a casa, se encuentra con que Mozart ha muerto, y pende sobre él la sospecha de haberlo envenenado. No cuento el final, pero aseguro que es estrujante.

Sospecho que la novela contiene datos, guiños que no alcanzo a comprender; porque hay referencias culturales e históricas precisas, mas otras me parecen símbolos para mí indescifrables. Quienes conozcan la masonería y la vida de Mozart de seguro apreciarán mejor la obra de Alejandro Aldana (Chiapas, 1973).

El autor ha publicado varios libros, y es además promotor cultural, editor y ensayista. Esta novela no decepcionará a quienes la lean.

Alejandro Aldana, Bajo la pálida
sombra de Mozart. Instituto Estatal
de Cultura de Tabasco, México,
2010; 241 pp.

Hacia 1790, Wolfgang Amadeus Mozart está muy enfermo y padece severos problemas económicos, y gran parte de los mecenas se niegan a reconocer su talento; tiene líos con una Sociedad masónica que le recrimina no ser fiel a los preceptos de ésta y en consecuencia se determina matarlo.

miércoles, 16 de noviembre de 2011

AMLOVE

AMLOVE

Por: Jeremías Marquines

La designación de Andrés Manuel López Obrador como candidato presidencial de las izquierdas mexicanas les ha cambiado el escenario y la vida a varios de los políticos que sentían que la elección del 2012 era sólo asunto de mero trámite. Uno de ellos, es el soso aspirante a la candidatura del Partido Acción Nacional (PAN), Ernesto Cordero quien, según dicen, ya no será el abanderado de su partido, pero tampoco Santiago Creel. El otro, es el candidato del PRI, respaldado por Televisa.

El aspirante panista a la candidatura presidencial, que hasta esta semana se asumía como delfín del presidente Felipe Calderón, será cordero sacrificado en las próximas semanas en aras de la estrategia. Lo que sucede es que, de acuerdo a la opinión de los expertos, Cordero no tiene ni la habilidad ni la experiencia política necesaria para enfrentar a un verdadero monstruo de la política como lo es López Obrador. Cordero es un personaje unidimensional, gris oscuro, que sólo es capaz de repetir las frases que le preparan sus asesores. Su desproporción es tal, que de pronto le ponen a decir cosas que rebasan por mucho una figura tan aguada como la suya, como por ejemplo: cuando dice que “no se preocuparía demasiado por López Obrador pues el PAN ya le ganó una vez”. La frase de por sí torpe porque revive el espectro del fraude cometido a López Obrador en 2006, es además, una balandronada que le queda demasiado grande a un borreguito como Cordero.

Por cosa de estrategia, es muy posible que sea Josefina Vázquez Mota y no Cordero, la que represente al PAN; los asesores panista esperan explotar al máximo la cuestión de género y creen que eso limitaría mucho el habitual pugilismo político obradorista, y al mismo tiempo reduciría la imagen chocarrera del priísta Peña Nieto. Para los intereses electorales panistas da mejor resultado Vázquez Mota que Cordero.

No obstante, también hay las versiones de que, derivado de los recientes números electorales obtenidos en Michoacán donde el PRD y el PAN fueron derrotados, exista la posibilidad de que en un hecho inédito pero no imposible, ambos partidos puedan cerrar filas y operar bajo un esquema de concurrencia con el fin de evitar el regreso de la corrupción al gobierno federal. Todo es posible, pero además, es una realidad absoluta que, si hoy fueran las votaciones para presidente de la República y el PAN y el PRD fueran separados, el ganador indiscutible sería el PRI. Y este hecho se da, no como campechanamente creen algunos, de que la mayoría de los mexicanos quieren el regreso del PRI, sino porque la población de México está severamente dividida. Si el PAN y el PRD superaran sus traumas caciquiles, demostrarían que la mayoría de México no quiere el regreso del tricolor, pues los votos de ambos partidos superan por mucho el índice electoral del PRI como quedó acreditado en Michoacán.

De lo que no hay duda, es de que, el Andrés López Obrador de hoy no es ni la sombra del que, según Cordero le ganó el PAN en el 2006. El candidato de las izquierdas es hoy un hombre que proyecta más tranquilidad y estabilidad emocional y política que sus contrincantes de los otros partidos; físicamente, sigue siendo un personaje con gran dinamismo y versatilidad. El López Obrador del 2012, no es el tipo necio al que le tendieron trampas mediáticas para exhibirlo hasta la saciedad, ahora es todo lo contrario: es un político mesurado, con gran paciencia para escuchar y expresar sus opiniones. Es el hombre que acepta con serenidad “una mayor cooperación internacional en materia de seguridad y desarrollo económico”, este es el mensaje que envió en su discurso del martes a los Estados Unidos, el gran elector.

Ahora el ex jefe de Gobierno de la Ciudad de México está cambiado, por primera vez en varios años se reunió con empresarios de Monterrey, sede de algunos de los grupos económicos más importantes del país y que en el pasado no querían ni verlo en pintura. Asimismo, viajó a Estados Unidos para hablar en el Centro Woodrow Wilson, uno de los espacios de reflexión académica y política más importantes de ese país.

De acuerdo a las encuestadoras la evaluación negativa del virtual candidato pasó de 47% de los electores en 2007, a 29% en las mediciones de este año. Y aunque eso no basta para hacer un buen papel en las próximas elecciones presidenciales, la nueva imagen de Obrador tiene el potencial suficiente para recuperar más terreno en corto tiempo y colocarse, con el apoyo de Marcelo Ebrard, como la opción más sensata y mejor capacitada para gobernar México.

A lo anterior, hay que sumar que en esta ocasión, a diferencia de hace seis años, Obrador parece ser el favorito de la Casa Blanca, en Washington, sobre todo, porque aun contra la especulación fanática, es el candidato que mejor garantiza al gobierno de ese país mantener la lucha contra el narcotráfico que representa uno de las mayores riesgos para la seguridad interna de E.U., país que no desea un gobierno mexicano pactista con el terrorismo de la droga al que asocian la figura de Peña Nieto.

Por donde quiera verse, las circunstancias hacia el 2012 se están alineando positivamente a favor del político tabasqueño. De allí que algunos grupos de poder como el emporio Televisa que ya se ha definido por Peña Nieto, traten de nuevo como lo hicieron en el 2006, de manipular la frágil conciencia mexicana para impedir desde ahora que Obrador continúe su carrera ascendente. Echando mano de todos sus recursos mediáticos, los televisos quieren sembrar la idea de que ni juntos PAN y PRD, le ganarían al PRI. La estrategia mediática de televisa es tan obvia y burda como la de oponer la opinión de Peña Nieto a cualquier tema de importancia nacional que pase por sus pantallas. Mientras AMLO sigue vetado en esa televisora.

Por si fuera poco, una extraña coincidencia de dos opinadores importantes se pudo leer esta semana en El Universal. José Cárdenas tituló su artículo “El PRD, desahuciado”; mientras que Leo Zuckermann, le llamó “El fin del PRD”. La tesis que manejan los dos es que “Hoy el Partido de la Revolución Democrática ya no da para más. Está perdiendo elecciones al por mayor”; y que por lo tanto, López Obrador no tendrá oportunidad ante el priísta. Más claro ni el agua.

Pese a la adversidad, AMLOVE como le han comenzado a llamar en las redes sociales debido a su propuesta de crear la nueva “república amorosa”, sigue adelante. Pese a todo, la cúpula perredistiana chuchista se resiste a salir a festejar a su mejor candidato. Pese a que el PRD debido a líderes desobligados socialmente se hunde cada día más, la esperanza de la gente sobrevive en la figura obradorista mientras esperan la hora de la revancha en el 2012. ¿Entonces a qué se dedicarán los chuchos?


viernes, 14 de octubre de 2011

César Aira: Una bestia de la mala escritura


César Aira: Una bestia de la mala escritura

Por: Alejandro Aldana Sellschopp

Hace años leí el nombre de César Aira en un párrafo de la novela de Carlos Fuentes: La Silla del Águila, Fuentes no sin ironía mencionaba que el escritor argentino ganaría, en un futuro no lejano, el premio Nobel de Literatura, sin más comencé a buscar la obra de aquel enigmático narrador, la búsqueda fue tortuosa, parecía que nadie estaba interesado en vender sus novelas, y muchos de mis amigos, grandes lectores algunos de ellos, no lo habían escuchado si quiera mencionar, hasta que una buena tarde Pedro Faro, me dijo que había conseguido una loca y descabellada novela de Aira, se trataba de El Congreso de Literatura, la leí de una sentada, sin saber si dicha lectura me había gustado o no, si me parecía bueno o no, si quería seguir leyéndolo o no, mi estado frente a la lectura era de sorpresa, gusto y rechazo al mismo tiempo. Al pasó de los días volví a leer el libro, y mi confusión era aún mayor, decidí seguir leyendo las novelas de César Aira, así fui leyendo una tras otra las obra de éste extraordinario narrador.

La literatura que concibe Aira es una permanente provocación, jamás permite al lector confiarse, no estamos frente a una narración cómoda, recurrentemente nos golpea con figuras, giros, extraños pasadizos que conducen a dimensiones insospechadas del hilo argumental. Aira dista del tradicional escritor latino americano, rehuye los encuentros de escritores, la entrevistas, publica sin parar, cosa que es un gran pecado para un escritor latino americano, tiene alrededor de cuarenta y cinco libros, casi todos novelas cortas, además de ser profesor de literatura, hacer reseñas, traducir y escribir ensayos, todos sus libros se han publicado en editoriales pequeñas, otro pecado para un escritor latino americano, en México afortunadamente lo publica ERA.

César Aira se revela contra la racionalidad occidental, para él la literatura se convierte en un territorio virgen, donde pueden confluir Borges, Sarmiento, Rimbaude, Raymond Rousel, lo fantástico, lo surreal, etcétera, etcétera, todo con un extraordinario manejo de la narración, gozando siempre de una frescura y naturalidad poco frecuente en nuestras letras, no teme al lugar común, lo aborda hasta transformarlo, recurre a la novela histórica con tal rigurosidad que sorprende en la mezcla de sus elementos, así mismo maneja el lenguaje con una hermosa elegancia y en ocasiones con descarado descuido.

Hace apenas unos meses ante una tabla de carnes y quesos, en la tropical noche de Villahermosa, Tabasco, platiqué con Vicente Gómez Montero, y él, gran lector, me habló maravillas de Canto Castrato, la bella novela de Aira, reconozco que fue un regocijo escuchar al maestro Vicente hablar sobre Aira, con su aguda mirada de narrador me descubrió a un narrador que se preocupaba profundamente por la cultura de la Europa prerrevolucionaria, los personajes moviéndose por un amplio espectro espacial: Nápoles, Viena, San Petersburgo; empresarios, teatreros, músicos, músicos y muchos músicos, no era de extrañarse que Gómez Montero disfrutara de dicha obra, sabemos que él es un gran conocedor de ópera, y Aira se había convertido en un excelente cómplice.

César Aira es un juguete rabioso de la imaginación, inventa como un torrencial imparable, lleva cada uno de sus argumentos hasta sus últimas consecuencias, sin parecer importarle romper con ciertas reglas de la narrativa, en su tejido narrativo encontramos una gran cantidad de lecturas perfectamente decantadas. Aira ha declarado en alguna parte: “Nunca me interesó la sensualidad de la palabra. De hecho, lo que escribo es con el tono más claro, más neutro posible. Trato de que la prosa sea casi transparente”, es así como se escribe esta literatura que en verdad nos desorienta, aún cuando en algunos capítulos, los más, nos atrapa por su naturalidad, por ejemplo en “Cómo me hice monja”, uno no puede dejar de leer y reír, que esa es otra cualidad de Aira, el sentido del humor, un humor incluso ingenuo, pero eficaz.

En una entrevista Aira comento que: “El primer y último mérito de un escritor es ser distinto”, y vaya que lo consigue, su forma de escribir es profundamente personal, único, en la misma entrevista César Aira habla de parte de su proceso creativo, y nos muestra un poco la manera que concibe sus novelas: “Ubiqué la acción de esa novela en Ucrania, pero podía haber sido cualquier otro lugar. No sabía, y sigo sin saber, nada de Ucrania. Pero ahora recuerdo que cuando la estaba escribiendo miré una enciclopedia, y ví que Ucrania produce arrabio. Tampoco sé lo que es el arrabio, pero me gustó la palabra, e hice que los villanos pertenecieran a “la mafia del arrabio”, dicha declaración es genuinamente Airiana, seguro que cualquier escritor en ciernes o lector ingenuo puede creer a pie juntillas lo dicho por Aira, sin embargo, al leer las novelas nos damos cuenta que el autor sabe muy bien de lo que habla. Quizá de los elementos de la narrativa que Aira rompe con mayor elegancia es la verosimilitud, y muchos de sus detractores se centran en ese elemento para criticar sus libros, les es inverosímil creer en un narrador que no respete lo verosímil. El mismo Aira dice: “Ahora bien, con mi utilización del azar (…), y mi gusto innato por el surrealismo, mantener el verosímil es un desafío. Para ponerme a la altura tengo que subir todo el tiempo la apuesta de la invención”, es por ello que sus argumentos van creciendo en elementos fantásticos, estrambóticos, y para algunos poco o nada creíbles.

Los lectores de César Aira deben ser tan raros o más que él mismo, dónde encontrar hordas de hombres y mujeres que no dejen de leer una novela en la que existen cambios sin justificación de la trama, o bien se yuxtaponen historias, los personajes mudan de identidad de un momento a otro, y sus finales parecen acelerados, descuidados, como si no importara cómo debe finalizar una buena novela. Es por ello que a sus libros o los amas o los odias, y quienes lo aman se convierten en coleccionistas, buscadores de sus libros en intrincadas librerías, acostumbrados a escuchar un ¡NO! Rotundo acompañado de una mueca de extrañeza de los libreros frente a la pregunta: “¿Tienen algún libro de César Aira?”, recorren, (recorremos) las más diversas editoriales para conseguir sus breves novelas: Achaval, Anagrama, Beatriz Viterbo, Emecé, Era, Joaquín Moertiz, Mondadori, Simurg, Random House, entre otras.

Aira es un escritor bizarro, un erudito que combina el cómic, la ópera, lo arrabalero, malas películas, los deportes, lo políticamente incorrecto, autores desconocidos para la mayoría de lectores, grandes poetas, historia, ciencia ficción, etc, etc. Es y será siempre, a menos que se ponga de moda, un escritor para pocos lectores.

jueves, 22 de septiembre de 2011

Los Amorosos no callan

¡LOS AMOROSOS CALLAN!




Y nos dejan
Su silencio más fino, el màs tembloroso, ¡El màs insoportable!
- Por Motserrat Soler.
13 años de actividades ininterrumpidas.
Octubre de 1993, ¿Una escuela de Escritores?
¡En San Cristóbal, habrán Diplomados en literatura! Bueno es que a San Cristóbal, comiéncen a pasarle cosas buenas: Una Escuela de Escritores -¿Para qué? Preguntan los demás:
13 años de diplomados en creación literaria.
Para encontrar una identidad que late muy profundo, para reunir fuerzas y valorar “eso” que le da a otra visión de las cosas, para poder caminar por las palabras y encontrar un nombre propio: Montserrat, y saberse invisible entre su eco.
1994 Que viene la guerra, que la Paz se tarda...
Es necesario ahuyentar a esos demonios, ¡Un festival para conjurarlos! Eso dijo José Antonio, y convocó a los hacedores de cultura para que la muerte no se quedara. Nos reunimos todos en enero, sobre un camión, en el parque, con canto, poesía, pintura, fotografía, teatro... Porque vino la guerra y cayó como vino amargo sobre los buenos planes. -Dile que se vaya. -¿Cómo?, - ¡Díselo con poesía!: -Porque ya me voy a ver / a doña muerte de cerca / a ver si de mí se apiada / a ver si de mi se aleja....
El festival se hizo. También en 2003, cuando los poetas internacionales convocaron a pronunciarse contra la guerra de Irak bajo el grito de NO EN NUESTRO NOMBRE, También José Antonio nos convocó de nuevo Ante la guerra., Los Amorosos NO callaron.
Al 94 llegó el mes de julio ensangrentado. Y sólo estaban ellos creyendo en la poesía. Estuvo Maura, estuvo José Antonio, ese día 25, serenos, ante mi desesperación, diciéndome que no estaba sola. Estaba la poesía. Quién cree en la poesía en estos tiempos? A quién le importa. En lo único que pensamos es en sobrevivir. Y la poesía siempre nos sobrevive. Ella es el último refugio, la muleta, la última medicina, los santos óleos... Al 94 sobrevivimos juntos, con la amorosa poesía de Los Amorosos... Me fui a tierra caliente, y en vez de libro parí otro hijo, las páginas pueden esperar, tienen paciencia infinita... Así llegó el nuevo siglo y con ello...
13 años en la formación de escritores mayas y mestizos.
Los Amorosos buscan... Encuentran.... Nuevos idiomas para los sonetos. En Maya, que se midan ahora las palabras! Hasta contar 13, el número maya del supramundo. En el renacimiento de literatura Maya fue primordial la guía de Los Amorosos.
13 años de publicaciones.
Desde un libro de plata, hasta los indispensables. (Con perdón de mi misma por jamás haber superado ese pánico a la hoja encuadernada). Sólo quiero que sepan que ahí comenzó este camino que no acaba, que me acompaña y se guarda hasta ese día, cuando yo ya no estorbe podrá posarse en páginas. Pensaba hacerlo el 27 de abril del 2004, pero llegó la muerte y me clavó su estaca hasta secar sus huesos en los míos.
13 años de seminarios de composición en poesía y narrativa.
Que suerte tan inmensa sentarnos en esa aula, cobijo en esa etapa. En sus paredes, los ojos de poetas sobre nuestras cabezas. Ahora sabemos que es endecasílabo.
13 años de recitales poéticos.
Ese 94 éramos solo cuatro, y nos fuimos invitadas por la UNACH para leer a Tuxtla. Poco a poco se fue calentando la llamita, hasta ser fuego y hoguera que cose el pan. Hubieron muchos, muchos recitales más. Es una gran cosecha:
13 años de presentación de libros.
El de Saidé, de Ulises, de Antonio, de Alejandro, de Ruperta, de Josías, de Martín Mérida... De todos, el mío no fue nunca. -¿Otra Rosario? ó es mejor o mejor no es nada, dijo en aquella lectura José Antonio.Esa enseñanza perdura y me hace respetar con las mayúsculas a esa energía que salva el curso de la sangre, que se llama poesía.
13 años de conferencias.
AHI TOMÓ CAFÉ JUAN GELMAN y, aunque esa esquina cierre, ese acto de la historia, es ahora imborrable.
13 años de talleres de fomento a la lectura.
Y de poesía!, cuando en México se tiene el 1.8% de nivel de lectura, y de eso el 0.01 será poesía En Los Amorosos la leyeron.
13 años organizando festivales de poesía, arte y cultura.
El último fue el más tembloroso, y al corazón del mismo apellido, el más insoportable, porque ahora estamos solos, solos, solos...
13 años de premios para exalumnos y maestros.
Gracias por los míos porque suyos son...
13 años de premios para la Escuela de Escritores.
El primer premio fue que Los Amorosos hubiesen estado en la esquina de José Felipe Flores y Benito Juárez, el primer premio es que hayan abierto sus puertas y se hayan sostenido, aún en los embates y tormentas. El primero de los premios fue haber encontrado un entusiasta José Antonio que se atrevió a zambullirse en la poesía. Y a la elegancia de Maura que escogió a esta ciudad para quedarse en ella y enriquecerla con sus colores durante 13 años. Los demás fueron segundos, de triunfo ante el esfuerzo y orgullo para Los Amorosos.
13 años de lecturas de nuestros libros en Canadá, Argentina, Honduras, España, El Salvador, Estados Unidos, Alemania, Guatemala, Austria. Michoacán, D.F., Guadalajara, Jalapa, Monterre, Campeche. En Tuxtla Gutiérrez, Tapachula, Zinacantán, Cancuc, Oxchuc, Yajalón.
Cada quien tiene su historia, cada quien la cuenta con sus propias palabras, pero cada uno de los escritores que por ahí pasamos, reconocemos un antes y un después de haber cruzado esa puerta. Los Amorosos fueron parteaguas. Al salir fuimos más completos, con más hambre de cultura y más ricos (porque el dinero, es la riqueza de los ignorantes.)
13 años con más de medio millón de visitas en nuestra página web: http://www.indigenouspeople.net/frontera/
13 años fomentando la unidad entre pensamiento crítico y belleza.
Indiscutible. Dualidad indivisa en nuestros corazones.
A sus 13 años el Espacio Cultural Jaime Sabines te espera para finalizar un ciclo: el del treceno verso que va a la luz.
Hoy 9 de septiembre se clausura esa esquina y con ella un trozo de la vida que no acabará nunca...
Esperaremos el Alejandrino.
Comenzará septiembre José Antonio y con sus días tus pasos recorriéndonos
El 9 de septiembre con tu espacio se cerró nuestro párpado para guardar la penúltima lágrima
nos hiciste amorosos, y nos quedamos llorando esta vida que sin ti se hace más larga
Y viene el 24 con tu ausencia sembrada, queremos florecerla, te pensamos, y ninguno te iguala, células somos todos iluminados siempre a media noche por el filo de tu alma
Y no fue tu poesía ha sido toda la que tu nos leiste la que acercaste duro a las pupilas
Con esa que prendiste nuestra llama.

martes, 26 de julio de 2011

José Antonio Reyes Matamoros

Nuevas ausencias

Por: Rodrigo Núñez de león
Mi amigo José Antonio Reyes Matamoros se ha vuelto eterno, desde hace cuatro meses se esfumó de este mundo y nadie sabe donde andará fundando espacios para la creación y difusión de las artes y culturas o editando las obras de noveles escritores. La artista y pintora Maura su compañera ha de estar inconsolable, ojalá que estas breves palabras evoquen y sirvan para que todos los que gozamos de la amistad de José Antonio y Maura al unísono les transmitamos sinceros abrazos en señal de dolor, de duelo compartido.
Cuando Chiapas vivió una efímera pero significativa guerra para reivindicar a los pueblos, las etnias chiapanecas, a los hombres y las mujeres casi por siempre colonizados al interior de este estado y del país, Maura y José Antonio dieron vida, fundaron, el Centro Cultural Jaime Sabines en una casona de San Cristóbal en la que funcionó una escuela de escritores sucursal de la SOGEM, una galería-librería y un restaurant que servía excelentes platillos y buenas bebidas. El centro cultural estaba ubicado a dos cuadas de la calle Real de Guadalupe. Carlos Jurado pintó y colgó en la pared más visible de aquel espacio un retrato, con proporciones de mural, del famoso doctor sancristobalence que en tiempos del imperio español fue médico del rey y destacó como inventor, por lo que la calle donde estuvo el Centro Cultural Jaime Sabines hasta la fecha se llama Felipe Flores. Algunas pinturas de Maura y otros fotógrafos y artistas cuyo nombre no recuerdo decoraban la casona en la que la gente podía sentirse a gusto y expresar con libertad sus ideas sin temor ni acciones de censura .aunque afuera todavía retumbaban los ecos de los diálogos en la catedral en los que los beligerantes iniciaban un diálogo por la paz cuyos acuerdos no se han cumplido en su totalidad. Muchos poetas y escritores leyeron allí parte de sus obras. La poeta Ámbar Past presentó la revista artesanal La Jícara cuyas ediciones son una obra maestra de impresión serigráfica del taller Leñateros que Ámbar fundó con mujeres indígenas que también son poetas que saben hacer a mano bellos papeles y dibujos. No serían suficientes estas líneas para referir todas y cada una de las actividades que se llevaron a cabo en el Jaime Sabines coleto. Pero puedo informar que el propio poeta mayor, cuyo nombre honraba aquel espacio, aceptó con beneplácito que llevara su nombre.
Da tristeza y nostalgia porque hoy ya no están por acá ni Jaime Sabines ni José Antonio Reyes Matamoros y el Centro Cultural cerró sus puertas hace algunos años. Maura ya no radica en San Cristóbal. ¿Quien se animará para continuar con la promoción cultural democrática e independiente ?

sábado, 23 de julio de 2011

Oscuridad y luz Bajo la pálida sombra de Mozart


Oscuridad y luz bajo la pálida sombra de Mozart

Luz Helena Horita Pérez

Bajo la pálida sombra de Mozart es una invitación abierta a reconocer el carácter complejo de la realidad. Alejandro Aldana rehúye del facilismo en la literatura a través de la creación-recreación y renovación de la mirada sobre uno de los músicos más geniales que ha tenido la humanidad, Wolfgang Amadeus Mozart. En esta obra se hace patente la búsqueda constante de Aldana en la construcción del hacer artístico literario, entregándonos una novela bajo la estructura decimonónica pero enriquecida con el manejo de lenguaje, voces narrativas y recursividad que se perfilan como el sello creativo del autor, y que se despliegan en la conformación de indicios para descifrar las premisas filosóficas que subyacen al texto.


Ante la pregunta obligada “de qué trata la novela” corro el riesgo de contestar sin abarcar la totalidad y riqueza de su contenido, ya que los niveles de lectura, en ejercicio pleno de la hermenéutica, permiten identificar bien la historia de búsqueda, prueba y retribución del héroe, bien la historia de amor donde almas gemelas encuentran su trágico destino, o un suspense con una multiplicidad de posibilidades alrededor de la muerte de Mozart, subsistiendo como condición tácita la naturaleza del sino.


Es la historia de Alexander Distel, joven burgués acaudalado de la Alemania de fines de siglo XVIII, cuya posición social y económica, alta educación, y espíritu crítico se combinan con una obsesión casi enfermiza por conocer a Mozart. Su encuentro con Brigitte, joven aristócrata de

notable belleza, argumentos ágiles e inteligentes y con quien comparte la afición por el músico salzburgués hace surgir entre ellos una profunda atracción que, envuelta en juegos sexuales y seducción intelectual los lleva a identificarse mutuamente como “espíritu de su espíritu”, seres de la misma materia. Christoph, amigo y confidente de Alexander desde la niñez, joven de espíritu libre se convierte en el cómplice ideal en la búsqueda por conocer a Mozart el Mago, ya que al joven Diestel le ha sido revelada la verdadera naturaleza de Amadeus como Mago cuya creación sólo puede ser entendida como manifestación de una comprensión del Universo sólo desvelada por almas extraordinarias.

Esta visión es la que mueve el ánimo y energías del Alexander: conocer al Mago, y en esta empresa es la Hermandad masónica la vía perfecta para acercarse al genio. El origen aristócrata de Christoph lo convierte en el interlocutor perfecto frente a la Hermandad, sin embargo conseguir este acercamiento coloca a Alexander en el centro de una conspiración cuya única finalidad es “la salvación del alma de Mozart”. La propuesta de la conspiración planteada por Aldana parte de reconocer a Mozart como revolucionario por excelencia, como lo ha señalado acertadamente Vicente Gómez Montero, Mozart es revolucionario por rebelarse contra la explotación y la creación por encargo,

condiciones que suprimen la naturaleza misma del arte: la Libertad.


Sobre la estructura de la novela

Estamos frente a veintiséis capítulos, cada uno de ellos con un exordio que va desde fragmentos de cartas de Mozart, dirigidas casi todas ellas a su padre, así como textos de Don Giovanni, Réquiem y La flauta mágica; cabe precisar que esta última ópera es la clave sobre la cual se ha escrito Bajo la pálida sombra de Mozart. A través de la recursividad Aldana plantea una novela fractal donde la trama de La flauta mágica se desdobla y reformula a lo largo de la historia, llegando inclusive a insertarse a sí misma en la narración. De esta forma podemos encontrar en los dos primeros capítulos un eco a la obertura y la primer escena donde Tamino es perseguido por una gran serpiente, prefigurando el destino de Alexander en su espíritu atormentado tras el primer encuentro fortuito con la Hermandad.


La imagen especular de ambas tramas persiste en los personajes principales: Tamino, Pamina y Papageno en relación perfecta con Alexander, Brigitte y Christoph; sin embargo esta imagen se trastoca en el transcurso de la novela. Al igual que en la trama de La flauta mágica el genio

malo que ha secuestrado a Pamina se descubre como en el sacerdote sabio Sarastro, y la Reina de la Noche de ser la madre desconsolada se revela como un personaje maligno, así también Aldana nos revela la verdadera naturaleza de Brigitte y Christoph, ecos de la Reina de la Noche

y Monostatos respectivamente. Esta revelación es la piedra de toque donde se define el destino trágico de Alexander con una maravillosa vuelta de tuerca de la historia.

Es notable el uso de figuras de recursividad, cajas chinas llamadas así por Vargas Llosa, las cuales se aprecian a lo largo de la obra con diálogos entre Alexander, Brigitte y Christoph a través de las que abren espacios donde se develan aspectos de la situación política y económica de la Alemania y la Europa de fin de siglo XVIII, los intereses y prácticas de la aristocracia y burguesía, las condiciones de censura de artistas como el Marqués de Sade y sobre todo aspectos relevantes sobre la vida de Wolfgang Amadeus Mozart.


Voces narrativas y personajes

El manejo de las voces narrativas en esta obra es fundamental para el tratamiento de los personajes. En la mayoría de los capítulos prevalece la narración en presente y en tercera persona administrando afinadamente diálogos y narraciones incrustadas (recursividad que Aldana maneja con destreza); es bajo esta voz donde observamos la transformación Alexander como protagonista principal en esta historia de búsqueda y prueba para alcanzar su destino. La voz omnisciente nos devela los pensamientos e inquietudes de los personajes, enriquecida de indicios para reconstruir a partir de ellos las costuras invisibles que articulan las acciones.


Alternada con esta voz narrativa aparece la primera persona, voz con “la veracidad del Yo” que únicamente le es válida a Christoph a través de la correspondencia que mantiene con su amigo Alexander; esta voz epistolar evoca la de Mozart en los fragmentos de cartas con que abren catorce de los veintiséis capítulos; la naturalidad en el lenguaje de Christoph cimienta la lograda construcción del personaje, controvertido y complejo, haciéndolo entrañable.

El tratamiento que Aldana da al personaje de Amadeus se encuentra manifiesto desde el título de la novela Bajo la pálida sombra de Mozart, ya que a pesar de ser la figura alrededor de la cual se desarrollan las acciones, el motor mismo de este movimiento, aparece únicamente

referenciado en la voz de otros personajes.


Temas secundarios

La obra tiene como eje la búsqueda de Mozart lo que integra la música como elemento necesario ya que es esta el lenguaje a través del que se expresa el espíritu del mago. La naturalidad con que aparece en el texto nos provoca, invariablemente, a buscar la obra del músico para disfrutar de ella durante la lectura o acaso intentar descubrir las claves que guarda. Hablar de Mozart también implica ubicarnos en un contexto histórico determinado, el siglo de la Ilustración que enarbola la razón como guía y luz de la humanidad. Aldana conoce bien esta época en que la aristocracia y clero son cuestionados por la burguesía, Alexander es hijo de su tiempo y lo vemos exponer su pensamiento e inquietudes en el transcurso de la novela, comprendiendo los lazos de pensamiento libre que lo unen a la figura de Amadeus.

No podemos obviar relación filial padre – hijo/hija como tema relevante en la novela. Alexander, Brigitte y Mozart son personajes que Alejandro Aldana perfila desde la estrecha relación con sus padres. Son estos universos de cercanía al padre donde se anclan los caminos de cada uno, el aristócrata Hermann Duncker quien “quiere a Brigitte como al varón que jamás pudo tener”, Alexander “el viejo” quien se preocupa en cómo aprovechar junto con su hijo las circunstancias políticas y económicas de Alemania para mejorar sus negocios, y Leopold Mozart como guía de Amadeus aún desde la distancia, influencia que se hace patente en cada fragmento de carta seleccionada por Aldana.


Ambiente y condición de luz

Aldana maneja cuidadosamente los ambientes desde las primeras líneas, cargadas de acciones y tensión logra recrear las atmósferas con el uso preciso y certero del lenguaje, precisión que sólo puede conseguir a través de un conocimiento amplio de la época en que se desarrolla la historia,

haciendo evidente la investigación exhaustiva realizada por el autor. Aunado a lo anterior el logro de los ambientes se explica por la minuciosa definición de la condición de luz para cada una de las escenas. A pesar de que en la obra se encuentran momentos luminosos como condición de un estado de alegría y plenitud como lo es el encuentro entre Alexander y Brigitte y los múltiples viajes que realizan a través de Europa; sin embargo es el tono oscuro el que predomina durante la novela; la referencia constante a la Noche y a la Oscuridad son reflejo no sólo de un estado tímico disfórico, sino que en el plano paradigmático, la dualidad Luminosidad/Oscuridad parecen corresponder a la dualidad Apariencia/ Real-Verdadero, de forma tal que es en la ausencia de luz desde donde se inicia el camino hacia la Verdad.


Leer Bajo la pálida sombra de Mozart es acechar la Oscuridad, explorar los designios que se encuentran tras la noche, esa oscuridad no del mal, sino oscuridad consubstancial a la Luz, a la Verdad; esta novela nos lleva a intuir que más allá de lo evidente se urde una trama en la que no tenemos mas opción que aceptar el designio marcado por el Gran Arquitecto.


Finalmente, ante la pregunta “quién mató a Mozart” no puedo más que reconocer: de lo único que estoy segura es de las múltiples posibilidades de respuesta, varias tesis rondan mi cabeza, pero antes de sustentar una sin temor a errar, los invito a leer la novela y descubrir juntos lo que

nuestro autor plantea.


San Cristóbal de Las Casas, Chiapas

Julio 08, 2011.

sábado, 9 de julio de 2011

Asesinan a Facundo Cabral

Guatemala/ACAN-EFE

El cantautor argentino Facundo Cabral fue asesinado hoy por un grupo de sicarios en la capital guatemalteca, cuando se dirigía con su representante al aeropuerto internacional La Aurora desde el hotel donde se hospedaba. Cabral ofreció un recital el pasado domingo en el Teatro Nacional Rubén Darío, de Managua.


El portavoz de la Presidencia guatemalteca Ronaldo Robles, dijo a Acan-Efe que Cabral, de 74 años y quien se encontraba en Guatemala desde hace una semana, murió como consecuencia de múltiples disparos y que los miembros de su seguridad no pudieron repeler el ataque.


"Fue un atentado directo en su contra perpetrado por sicarios que utilizaron fusiles de asalto", precisó Robles.


El funcionario aseguró que el presidente guatemalteco, Álvaro Colom, "esta consternado por este hecho cobarde", y aseguró que tres equipos especializados de investigadores han sido asignados para trabajar en el esclarecimiento del asesinato del cantautor y poeta.


En el ataque también fue herido de gravedad el promotor artístico y empresario de origen nicaragüense, Henry Fariña, quien se debate entre la vida y la muerte ingresado en un centro asistencial de la capital guatemalteca. Fariña trajo a Cabral a Nicaragua y aparentemente promocionó sus dos últimos conciertos por Guatemala.


Medios locales que citan a testigos presenciales del ataque aseguran que los sicarios iban en dos vehículos de modelo reciente, y que los integrantes del equipo de seguridad del cantante se enfrentaron a tiros con éstos cuando intentaban detenerlos.


El vehículo en el que viajaba el trovador argentino quedó estacionado en la entrada de una estación de bomberos, a donde el conductor acudió en busca de ayuda.


Facundo Cabral, quien inició su carrera artística a los ocho años de edad, nació en la ciudad de La Plata, en la provincia argentina de Buenos Aíres, el 22 de mayo de 1937.


El autor de la mundialmente famosa canción "No soy de aquí, ni soy de allá", entre otras decenas de composiciones, en su último y fatal viaje a Guatemala ofreció dos conciertos en los que fue aplaudido por centenares de seguidores, uno en la capital y el último, la noche del viernes, en la ciudad de Quetzaltenango, al oeste del país.

martes, 7 de junio de 2011

bajo la pálida sombra de Mozart



Bajo la Pálida Sombra de Mozart: Novela de Alejandro Aldana Sellshop

Por: Luis Reyna

Queridos amigos y amigas, hoy tengo el honor de presentarles una novela deliciosa, comestible, enriquecedora, tengo el honor por partida doble o triple, pues Alejandro Aldana es mi amigo y estoy en Yajalón su pueblo natal; me siento muy honrado. Después de recorrer muchos mundos, muchos, regresó para hacer lo que hacen pocas personas de su tamaño intelectual, trabajar en la educación de su gente. Hoy amigos y amigas agradezco la invitación a este querido Yajalón ciudad de grandes escritores y lugar donde nació un importante movimiento literario que todavía dará mucho al mundo. Gracias.
Con un lenguaje sencillo, Alejandro nos da una novela erudita y nos lleva a la Viena de la segunda mitad del siglo XVIII, la describe con detalles de preciosismo arquitectónico, del clima, alimentos, ropas, diversiones, rostros. A cada página se despliega un conocimiento profundo de los pueblos germano - austriacos y sus costumbres en esa época, la época de Mozart.
La novela nos cuenta una historia ocurrida en dos universos, unidos por el hado de un destino tal vez fatal, tal vez mítico. Uno es Mozart a través de sus cartas, de él, de su voz percibimos al ser humano, su sencillez, vemos al hombre de carne y hueso, sus debilidades, su carácter, sus relaciones con el poder, la familia, los amigos, las crisis emocionales y de dinero. El otro universo es la del genio, el mago, el alquimista de la música, el semi-dios, contado desde la vida y percepción de uno de los personajes; Alexander su contemporáneo quien solo conoció a Mozart por su música. Junto a él (Alexander) están Christoph su amigo entrañable y Brigitte su esposa, una triada de nobles extravagantes y ricos. La música de Mozart hace hervir la sangre de Alexander, admira su creación por encima de todo, esta consiente que la obra de este genio es superior a la vida del mismo, en la música de Mozart Alexander encuentra la Magia de la eternidad, admira con militancia y fervor a Amadeus, ya desde entonces percibe las contradicciones que habitan al genio, al mago de Salzburgo, presiente la fatalidad y eternidad del personaje. Mozart es un Aquiles, de la música, vencido solo por su propia humanidad.
La flauta mágica, última Opera puesta en escena en vida de Mozart y Dirigida por él mismo, lleva el ritmo, es el punto de unión de los dos Mozart, el humano y el semi dios. Una Opera que solo puede ser interpretada por artistas con un alto grado de virtuosismo. Una Opera que lleva las claves del misterio de la vida, obra y muerte del genio.
Alexander que por su situación económica y política podría encontrar en cualquier momento a Mozart, se niega a un encuentro casual, él busca al mago, a ese ente que posee el cuerpo de Mozart, La metáfora es: Puedes encontrar al humano, pero no te acercarás al genio, a la magia que hay dentro de él. Esta proviene de un ámbito no humano, vedado para los simples mortales. ¿Esto podría aplicarse a cualquier persona? Quiero pensar que si. ¿Por qué entonces para que preocuparse tanto y por traer a Mozart a Yajalón, a Chiapas, a México, si no presintiéramos que al hacerlo un pedazo de ese pequeño dios nos transformará, y algo de esa historia ocurrirá acá?
Mozart fue miembro de la Logia escocesa, fueron ellos quienes derrotaron al absolutismo de las monarquías en Europa e instalaron los parlamentos, que debilitaron a la nobleza y su poder. Mozart que no era noble y toda su vida fue tratado como cualquier músico por esta rancia y en muchos sentidos, ignorante nobleza. Mozart fue en su época un liberal y un libertino. Esta parte de la vida del genio de da sabor al personaje, trasciende porque su música, que podría ser la voz de dios, proviene de un hombre que se disfraza de arlequín y hace parrandas en su casa hasta el amanecer, que sufre y debe dinero como todos, que no le alcanza con lo que gana. Su deidad es quizá la de Fauno, todo cuanto recibe lo gasta en extravagancias, en sueños, trata de vivir una realidad que no le es permitida por no ser miembro de la nobleza, por muy Mozart que sea.
La vida de ambos personajes Mozart y Alexander esta entrelazada, íntimamente vinculada, el destino los une, son hermanos astrales. Todo ocurre en una emocionante trama de misterio y erotismo, acompañada siempre de música: violines, pianos, violoncelos, arias. Una danza de vida, muerte, luz, que se intrican en los misterios de la masonería. Un universo simbólico que se va develando a la luz del genio de Mozart, quien es el único que comprende y habla el lenguaje de dios.
Al mundo lo afligió la muerte prematura de Mozar. Una cortina de humo formada de todo tipo de especulaciones sobre su muerte envuelve la historia del genio cuya obra es ya de por sí, mítica. Mozart murió de 36 años de edad, su legado es la música más esplendorosa y monumental jamás escrita, comprende 626 opus, 41 sinfonías, 28 conciertos para piano, 5 para violín y varios para otros instrumentos, sonatas (que constituyen piezas clave de la música mozartiana), música de cámara (dúos, tríos, cuartetos y quintetos) 61 divertimentos, serenatas, marchas; y 22 óperas.
La totalidad de la novela ocurre Bajo la Palida Sombra de Mozart, y como un destino irremediable esta sombra, cielo e infierno de Alexander se extiende hasta hoy día. Es tan grande y sublime el genio, que todo cuanto se hable de él será siempre bajo su pálida sombra.
Un Genio así no le cabe a la miseria de este mundo por eso Mozart quizá fue asesinado, quizá no soportó mas su humanidad, vivió con intensidad frenética, trabajaba hasta caer de cansancio, presentía su muerte y eso lo impulsaba a trabajar aun más. El mito de Mozart no nace con su muerte, solo se enriquece, las historias disímbolas y contradictorias de su muerte se entretejen para hacer del mito un nudo gordiano, los Masones, la envidia, su grandeza, la preservación del mito.
Bajo la pálida sombra de Mozart, es una reflexión profunda de la vida y obra del Genio de Salzburgo, una novela de divulgación histórica magistralmente trabajada, en hora buena para la literatura y para Mozart que sigue vivo, más vivo que siempre.